La accesibilidad es un gran elemento y un gran servicio para la gente que tiene una minusvalía. Así como gestores ambientales del litoral, un trabajo que hemos realizado ha sido mirar y calcular si la pendiente de las playas de Barcelona seguía la normativa, y de esta manera podíamos ver si por las pasarelas podían pasar las sillas de ruedas sin ningun problema. En general, hemos observado que la pendiente de las playas es llana y por lo tanto son accesibles, menos en la zona de la orilla donde hay bastante pendiente.